No me des más noches, dame amaneceres, noches he tenido
bastantes, en vela, sin ti. Dame amaneceres porque la mayoría los he pasado
durmiendo, solo, sin ti. Necesito compartir la cama, la almohada no, ya sabes que
esa es sólo mía, como tú, cuando te dejas. dame amaneceres como este, con su
noche, con su día, con la persiana a medio abrir, y el ruido de los coches que parecen
arpas si estás cerca. Dame amaneceres como el primero, sin ropa, sin saliva pero
con ganas, amanecer es distinto si no somos dos sino uno. Dame amaneceres toda
la vida, la que estamos consumiendo como se consume ese cigarro que hemos
olvidado para fumarnos a nosotros. Dame amaneceres eternos antes de que nos
llegue la noche eterna, esa que moriremos juntos, y ya que moriremos vivamos
ahora, que ya ha amanecido…
Muy bueno, yo lo he leído como un poema, felicidades de parte de Nieves y mía, Jesús Ordoñez
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